Luego de la crisis de la roya que afectó los cafetales mexicanos entre 2015 y 2017, las autoridades aseguran que la dificultad ha sido superada y la producción se recupera de a poco. Sin embargo, existen voces expertas que lejos de tener una perspectiva optimista, ven signos que la problemática aún dista de ser superada totalmente, a lo que se añade reportes recientes provenientes de Centroamérica que advierten de una mutación de la enfermedad que ataca incluso a los cafetos más resistentes.
Al respecto, el Lic. Alfredo Moisés Ceja, uno de los personajes más reconocidos de la cafeticultura mexicana, coincide en que la problemática de la roya en el campo azteca aún dista de quedar plenamente solucionado.
El titular de finca Montegrande añadió que en el entendido que estos cafetos si sean resistentes a la mutación de la roya centroamericana, todavía falta que al productor se le capacite de manera adecuada para cuidar y prevenir sus plantíos de cualquier afección.
“El productor no le da el manejo adecuado a sus plantas y fincas y me refiero a la cuestión de fertilización o sombra, o no tiene asistencia técnica al nivel que se necesita y de esto no se habla a la fecha. Si se habla de la creación de un nuevo instituto del café y de hecho en días pasados hubo una reunión con el Dr. Víctor Villalobos, nuevo titular de la Sader a la que aclaro no asistí, pero estuve enterado de lo que se habló y en mi opinión, el nuevo secretario me parece conoce del café y sabe a lo que se va a enfrentar en este sexenio y sabe cómo se tiene que manejar este tema, así que confío que tome las medidas pertinentes para evitar un nuevo brote de roya en el café mexicano” apuntó.
Sobre este punto, el Lic. Ceja aseguró que ya se tiene el estudio para crear el nuevo instituto desde hace un año, sin embargo los encargados de implementar este plan señalan que tardarán al menos un año más para echar a andar el ente cafetalero: “Esto es preocupante, si de por sí el estudio ya tiene un año de rezago y le agregas un año más para la operación del instituto, nos van a ganar los tiempos de nueva cuenta, como ha ocurrido prácticamente desde siempre” se lamentó.
“Pero el pequeño productor no puede renovar al mismo ritmo que los grandes y si el costo de producción les resulta mayor a los precios que hay de su cosecha en el mercado internacional y en el caso del México debe andar alrededor de 1.60 USD, mientras en el mercado internacional andará alrededor de 1.02 USD, ¿qué van a poder hacer con esos precios? No sé a dónde vamos a llegar con el café” se lamentó el Lic. Ceja.
Pese a lo anterior, el Lic. Ceja considera que dada la experiencia que ha vivido en años anteriores, esta nueva crisis puede traer una “limpia” en el sector, donde solamente aquellos verdaderamente comprometidos con el café mexicano permanecerán: “Quienes nos hemos dedicado al café hemos subsistido todos tipos de crisis y lo que pasa actualmente en 2018-19, lo comparo a lo que vivimos en 1970; lo malo es que estamos regresando cuatro décadas atrás. Considero que si ponemos metas y seguimos trabajando, podemos superar esta coyuntura. Los que somos cafetaleros de corazón no perdemos la esperanza y seguimos caminando aún con un panorama complicado, porque siempre digo que lo que corre por mis venas no es sangre sino café, soy la tercera generación de una familia dedicada desde hace un siglo a esta actividad; mis hijos son la cuarta generación y ya viene la quinta en camino. El café nos ha dado todo en todo este tiempo y nos seguirá dando, pero me parece que necesitamos más organización, esa es la palabra clave”.
Así que para el Lic. Alfredo Moisés Ceja, la organización aplica a todo el sector y de esa manera, se superará de manera definitiva la problemática de la roya y de paso, otras malas prácticas que afectan al campo mexicano: “Vamos a organizarnos y dejemos de apoyar a tantos líderes que lo único que han hecho es dañar la cafeticultura. Ojalá la gente de Sader y el Dr. Villalobos lo entienda y mejor den el apoyo directo al productor. Se han hecho y existen miles de censos de productores pero, ¿dónde están esos padrones? Siempre salen más y más caficultores, cuando por el contrario, debería haber menos y menos. Hay que hacer una limpia en el registro para que sólo queden los verdaderos productores. Entonces, ¿de verdad se apoyará al productor o seguiremos manteniendo gente improductiva? Ese es el reto del café mexicano”.